La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió un recomendación al Ejército por la el asesinato de las niñas Leydi, de años, y Alexa, de 11 años de edad, en Badiraguato, Sinaloa, en mayo pasado, en un hecho que se intentó pasar como parte de un fuego cruzado en un enfrentamiento entre criminales y elementos de las fuerzas federales.
Según el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), la CNDH notificó la recomendación 201VG/2025, de la cual aún no hay una versión pública, por violaciones graves a derechos humanos, que es la primera respecto a hechos cometidos durante la actual administración, relacionados con el caso en el que Leidy y Alexa fueron privadas de la vida, a la vez que su prima y primo de 12 y 14 años de edad, así como dos adultos fueron heridos de gravedad a consecuencia de que elementos del Ejército abrieron fuego sin justificación alguna en contra de la camioneta en la que circulaban en una carretera en el la sierra de Sinaloa.
De acuerdo con las versiones de familiares de las víctimas y de los militares implicados recabadas por El País, el ataque fue directo y se habría tratado de una confusión, aunque algunos militares afirman haber escuchado disparos y ver personas armadas antes de atacar, el oficial al mando del convoy dijo, en un principio, que no escuchó disparos aunque días más tarde cambio su versión. Ese día al menos 13 soldados dispararon al menos 113 balas en contra de la familia que llevaba a las menores a la escuela, según la misma fuente.
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El Centro Prodh indicó que la recomendación reconoce de manera acertada que las niñas fueron privadas de la vida resultado del uso indebido de la fuerza por parte de los elementos militares, que sus derechos como niñas se vieron vulnerados; así como, se violentó el derecho a la integridad personal de las personas sobrevivientes y el derecho a la familia de los integrantes de esta.
Además de que hace una referencia importante respecto a que las víctimas son parte de una familia que ya se había visto agraviada por abusos militares en 2008, cuando uno de sus integrantes fue privado arbitrariamente de la vida arbitrariamente por elementos del Ejército, lo que derivó en que el caso llegara a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
De acuerdo con El País, había 12 militares presos y uno prófugo por el ataque hasta fines de noviembre pasado. Por el ataque hay dos investigaciones abiertas, una en manos la Fiscalía General de Justicia Militar y otra por la Fiscalía General de la República (FGR).
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Reclaman a CNDH por omisiones en la ejecución de Leydi y Alexa en Sinaloa
El Centro Prodh reclamó que la CNDH omitió denunciar la práctica de la Fiscalía General de Justicia Militar de abrir investigaciones paralelas en casos de violaciones graves a derechos humanos e incluso “legitima” las actuaciones iniciales llevadas a cabo en el fuero militar, además que “no hace un análisis urgente y necesario sobre el rezago en el acceso a la justicia que ha provocado que las investigaciones a cargo de la FGR a la fecha no tengan buen cause”.
“Con base en los patrones previos visto en casos como el presente, preocupa que la Comisión no investigó a profundidad el intento inicial de encubrir los hechos circulando el rumor de que se había tratado de un fuego cruzado; versión que en eventos similares de uso arbitrario de la fuerza por elementos castrenses ha sido utilizada frecuentemente, como justificación para evitar la rendición de cuentas”, sostuvo la organización civil en un comunicado.
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