Familiares denuncian la muerte de Othoniel y el abuso infantil de Greta por parte de su padrastro Antonio Altamirano N e Itzel N
Othoniel, era un niño de cuatro años de edad quien murió a causa de un colapso por necrosis provocada por los golpes que le infringía su padrastro Antonio Altamirano N; y su hermana Greta, aún se encuentra con vida y con contacto directo al hombre responsable del abuso infantil, con la probabilidad de que le pueda pasar lo mismo que le pasó a su hermano.
Sus casos, se une a los MIL 116 INFANTICIDIOS que ocurren en México al año y a los inacabables casos de MALTRATO INFANTIL EN PUEBLA«
En mayo de 2023, Itzel y Antonio decidieron no regresar a los niños
— La Marla Sabrina (@lamarlasabrina) May 19, 2024
Por lo que su abuela y los tíos comenzó a buscarlos y dar aviso a las autoridades de su desaparición
Pidiendo ayuda a la comunidad de Tehuacán y Ajalpan para dar con su paradero pic.twitter.com/LWdosufMDc
Greta y Othoniel, vivían con su abuela materna quien demandó la Guarda y Custodia de los niños ante el Poder Judicial del Estado de Puebla. Esto debido a que su madre de los niños Itzel N, se encontraba en una relación abusiva con Antonio N.
Otra de las razones fue, porque Otho en diversas ocasiones, le relató a su abuela el maltrato que sufría por parte de Antonio Altamirano N. Diciéndole que le golpeaba, le jalaba las orejas, lo ponía a hacer sentadillas y lo mordía.
Othoniel 🩵🕊️ insistía en volver con su abuela y su tío Marco, quienes lo cuidaron desde su nacimiento
— La Marla Sabrina (@lamarlasabrina) May 19, 2024
Cuando pedía volver con su abuela, Antonio Altamirano Trujillo lo castigaba y lo ponía a hacer sentadillas, lo mordía y lo golpeaba #JusticiaParaOtho pic.twitter.com/z2ZTUP6nzw
Todo esto fue denunciado ante las autoridades que ¡oh sorpresa!, no hicieron nada. Ni el Poder Judicial, ni el DIF de Puebla, ni la Fiscalía y tampoco el Gobierno del Estado. Por lo cual el 5 de marzo de 2024, se presentó una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla.
A pesar de las agresiones que sufrían los niños, aún estaba estipulado en la custodia que los fines de semana tenían que estar con su madre Itzel. Lo cual arriesgó a los niños, ya no regresaran con su abuelita.
Cuatro días después de la muerte de Otho, su familia recibió un mensaje de un vecino en el que decía que fue testigo del maltrato que ambos niños sufrían. Hoy su hermana Greta aún se encuentra con los asesinos de su hermano.
LE EXIGIMOS A LAS AUTORIDADES ESTATALES Y NACIONALES SU INTERVENCIÓN EN ESTE CASO»
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