La Fiscalía de la CDMX aclara que no «rescató» al senador electo
Elementos de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua intentaron llevar a cabo la detención de Javier Corral, actual senador electo por Morena, en la Ciudad de México. Sin embargo, la intervención de Ulises Lara, titular de la Fiscalía capitalina, impidió que el ex gobernador fuera privado de su libertad.
El noticiario del periodista Ciro Gómez Leyva, uno de los más vistos del país, transmitió en vivo lo ocurrido en el restaurante Gin Gin, de la colonia Roma. La Físcalía de Chihuahua acusó a Corral de desvío de recursos, un juez local libró una orden de captura en su contra. Por su parte, Javier señaló que todo se trata de un plan de venganza por parte de la actual gobernadora de ese estado, María Eugenia Campos.
No obstante, la justicia de Chihuahua debió solicitar un acuerdo de colaboración a las autoridades federales o de la CDMX. Después de que Javier Corral realizó unas llamadas, elementos de la Fiscalía de la capital, entre ellos Ulises Lara, llegaron al restaurante y se llevaron al morenista en una camioneta.
Por ello, durante la noche del 14 de agosto y la mañana de día siguiente, diversos medios y líderes de opinión acusaron a Lara de «rescatar» al asesor en materia anticorrupción de Claudia Sheinbuam.
Ulises Lara, a través de un comunicado, explicó que el oficio fue recibido por las autoridades capitalinas minutos antes de que buscaran ejecutar la detención. «Por lo que aún se encontraba en proceso de atención, SIN una respuesta oficial«, aclaró.
Solo se trataba de un documento interno que bajo ninguna circunstancia les faculta a irrumpir en una entidad foránea y con ello violentar su soberanía, y mucho menos a cumplimentar un mandamiento judicial»
Ulises Lara, titular de la fiscalía de la ciudad de méxico
Javier Corral acusa a María Eugenia Campos de persecución política
El periodista Zedryk Raziel, escribió para El País que la Fiscalía de Chihuahua había estado planeando la captura del ex gobernador desde hace tiempo. El mismo senador electo confirmó dicha información en una entrevista para Sin Embargo.
El 8 de junio, Corral se enteró que el día de las elecciones elementos de la Fiscalía planearon una emboscada, ya que lo esperaron (junto con periodistas) en el colegio electoral que le correspondía. Sin embargo, Javier votó en una casilla especial de la Ciudad de México, por lo que sin darse cuenta frustró los planes de las autoridades de Chihuahua.
Desde ese entonces, el morenista informó a Claudia Sheinbuam y a López Obrador que Campos buscaba detenerlo antes del 1° de septiembre. Esto porque cuando tome oficialmente su puesto como senador, automáticamente gozará de fuero, es decir, cierta inmunidad contra persecuciones de los gobiernos.
Por ello, y tras la advertencia de que la Fiscalía de Chihuahua planeaba un secuestro, Javier Corral no salió de la Ciudad de México y militares lo escoltaron día y noche.
¿Por qué buscan la detención de Javier Corral?
La Físcalía de Chihuahua acusa a Javier Corral de desviar recursos de la Dirección de Comunicación Social para financiar la «Caravana por la Dignidad». En el 2017, durante su administración, el gobernador realizó una marcha a la Ciudad de México para denunciar que la Secretaría de Hacienda y el gobierno del PRI lo estaban chantajeando con recursos federales, cuando se destapó la Operación Safiro.
Además, el ex panista tiene denuncias por enriquecimiento ilícito y defraudación fiscal, ya que disfrazó como ampliación de su patio una vivienda en la colonia Partido Romero, en Ciudad Juárez.
¿De dónde viene la rivalidad entre María Campos y Javier Corral?
A través de su cuenta de X, Corral informó que presentará una denuncia contra la actual gobernadora de Chihuahua y el titular de la Fiscalía de Chihuahua.
Javier Corral militó en el PAN por casi 40 años, ahora pertenece al equipo de Claudia Sheinbuam. Cuando gobernó Chihuahua (2016-2021), su administración señaló a su antecesor, César Duarte, del desfalco de 6 mil millones de pesos. El nombre de «Maru Campos», en ese entonces vicecoordinadora del PAN en el Congreso, aparece en los recibos de sobornos a sindicales, empresarios y periodistas.
César Duarte permanecía en prisión por corrupción, sin embargo, durante el mandato de María Campos fue puesto en libertad.
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